Seres queridos (II)

La intensidad de aquel momento se apoderó de mí y lancé un grito de incredulidad que resonó entre aquellas enmoquetadas paredes. «¡¡Seres queridos!!». El hombrecillo me miró de muy malas maneras: «Si, mi estimada madame, ellos son las almas de todas las personas que murieron en este lugar. Ellas se reencarnaron en estos bondadosos felinos…

Por Anna Val 20/02/2025 Desactivado

Seres queridos (I)

En una bohemia metrópoli, de un lugar cualquiera, existía una concurrida ciudad en la que transitaban un gran número de anónimos intelectuales. Esta, en sus entrañas, escondía, con oscura intención, un vulgar callejón. Un callejón tenebroso y muy húmedo que, asombrosamente, todavía hoy, mantenía en pie unos funestos y tristes apartamentos cuya estructura amenazaba con…

Por Anna Val 13/02/2025 Desactivado

Las manchas rojas (III)

Cangrejo, muy afectado, gritó: «¡¡Es el Sarrampín!!». «¿¡El Sarrampín…!?», le preguntaron muy incrédulos. «Sí.», les respondió él y añadió: «Sí, y los dos ratones colorados os lo han contagiado». «Pero… ¿qué es el Sarrampín?»,  le volvió a preguntar Lola. Entonces, Cangrejo les contó que, en realidad, el Sarrampín se manifestaba a través de unos enormes…

Por Anna Val 19/12/2024 Desactivado

Las manchas rojas (II)

El pobre Nonet se cayó al suelo algo mareado por todo lo que le estaba ocurriendo, y las mariposas Mariposonas acudieron rápidamente en su ayuda y le llevaron a su casa para que pudiera descansar. A Lola, una pregunta empezó a darle vueltas en su cabeza…, ¿Por qué a Simpatía, Moix y a ella misma…

Por Anna Val 12/12/2024 Desactivado

Las manchas rojas (I)

Lola estaba peinando sus coletas, pues eran las «4+ A» en punto y era hora de ir al cole. A Lola le encantaba la escuela, ¡pues era una estudiante muy brillante! Era tan y tan brillante que el director del colegio, el señor Algernon, le encargó una tarea muy importante: ¡asegurarse de que el reloj…

Por Anna Val 05/12/2024 Desactivado

Peppino Puñetti ha muerto (V)

Tendida en la cama, amparada por el retrato de Santa Inés y con los nervios a flor de piel, por fin, la noche se plantó en mi ventana de manera contundente. Me levanté acelerada y me conduje presurosa hacía el ventanuco enredándome detrás de los largos y frágiles visillos que lo adornaban. Entonces, miré fijamente…

Por Anna Val 21/11/2024 Desactivado

Peppino Puñetti ha muerto (IV)

Llegué a la pensión exhausta y con la respiración cabalgando a lo loco dentro de mí. Pero, gracias a Conchetta, y al maravilloso patio trasero que escondía la coqueta pensión y en el que albergaba un solemne limonero, una sublime higuera y unas mesillas de mármol italiano, Conchetta sirvió sus manjares más exquisitos a sus…

Por Anna Val 14/11/2024 Desactivado

Peppino Puñetti ha muerto (III)

Sin darle mayor importancia a aquella improvisada reunión vecinal, rebocé mi dedo dentro del Cannnolo, extrayendo, de su interior, un sabrosísimo queso de ricota al que mi exigente paladar lo acogió con gran exaltación de máxima felicidad, mientras que yo parecía un cocodrilo, pues de mis ojos brotaban unas leves lágrimas de alegría contenida por…

Por Anna Val 07/11/2024 Desactivado

Peppino Puñetti ha muerto (II)

Todo permanecía minuciosamente ordenado… Por supuesto, en el escrupuloso orden siciliano, claro está, pero me sentía tan feliz de estar nuevamente de regreso a Ragusa, que, sin apenas deshacer mi equipaje, salí rauda y veloz de la habitación bajando la escalera de manera alocada. La cómica risa de Conchetta por ver mi escapada atolondrada, sonaba…

Por Anna Val 31/10/2024 Desactivado