Conversaciones con Adolfo (I)
Siempre he tenido la firme convicción, que un autor debe defender su obra hasta las últimas consecuencias. Incluso, hasta cuando duerme. Este, debe dar orden de forma imperativa a sus sueños. Para que custodien su obra mientras el autor descansa. Los sueños, transformados en fieles y nobles guerreros, alzan sus lanzas y con sus grandes…