El hotel de los ruidos (III)
Al finalizar aquel largo recorrido, llegamos a nuestro destino, y con el cansancio aplastando mi espalda y mis posaderas, logré bajar del tren con la ayuda de uno de los mozos que allí se encontraba. Un poco más lejos nos aguardaba el conductor que nos llevaría al hotel: «¡Ladies and gentlemen suban al coche!», nos…
El hotel de los ruidos (II)
Llegamos puntuales a la estación de London King´s Cross, la cual siempre es una inmensa satisfacción admirar… Pero, aquel placentero instante, se vería enturbiado por culpa de la torpeza de Yedda, mi doncella, al caerse del carrito de portaequipajes de manera violenta uno de los baúles que ella cerró con gran desacierto. Aquel baúl se…